Colegio Internacional de Estudios Celtodruídicos.
El Gran roble Intercéltico
(Bajo la presidencia iniciática y espiritual del Gran Druida
Renatos Bod Koad III y de la Gran Druidesa Korridwen)
¡Saludos fraternales!
Es evidente que si nuestro Colegio Druídico ha podido subsistir hasta nuestros días en el seno de la civilización judeo-cristiana, e incluso manifestarse, esto sólo puede haber sucedido con la ayuda de los Grandes Seres, ligados a la salud de nuestra raza celta.
El Druidismo se define como la expresión de todas las fuerzas psíquicas, intelectuales y físicas que actúan sobre esta parte del mundo occidental que le vio nacer, y más especialmente sobre la raza Celta, modelada por estos influjos.
La esencia misma de esta doctrina se ha transmitido hasta nuestros días a través de las Tríadas Bárdicas – Ciencia y Cosmogonía - , gracias al magnífico pentáculo llamado la Cruz Céltica, cuyas relaciones matemáticas están escritas en los trazados reguladores y en la imaginería esotérica de las Catedrales.
El druidismo es ante todo liberal y no dogmático. Se dirige a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, sea cual fuere su color u origen social, incluso aunque sean diferentes en sus relaciones entre hombres y mujeres, ya que buscamos entre la gente la sinceridad de aprender nuestra filosofía y de amar a su Prójimo como a sí mismos. En este punto estamos en armonía con la Liga Internacional de los Derechos del Hombre, que no admite ninguna discriminación.
El Druidismo es a la vez una filosofía, una ciencia y una religión